domingo, 7 de marzo de 2021

PRIMERA AVIONETA VENEZOLANA QUE ATERRIZA EN LA ISLA DE ANACOCO

El 15 de abril de 1967 el MOP-4 es la primera avio-neta en aterrizar en la Isla de Anacoco. Iba pilotada por el Capitán Oscar Matute, quien hizo un aterrizaje perfecto, po¬niendo a prueba en su etapa fi¬nal de construcción la pista proyectada por el Gobierno Esta pista de unos ochocien¬tos metros de longitud, cons¬truida en el corazón de la Isla y entre poderosos y gigantescos árboles selváticos, facilitará la comunicación con ese puesto de frontera que no ha mucho pro¬dujo una seria controversia en¬tre Venezuela y la Guyana. Y ¿Por qué la la llaman Anacoco? Según lo explica el periodista Germán Carías en un reportaje publicado en El Nacional, es porque allí vivió durante muchos años una Señora llamada Ana que vendía coco. (AF)

martes, 2 de marzo de 2021

COTÚA CASI LE SACA EL OJO A UN PESCADOR

Una Cotúa que sobrevolaba las aguas del río Areo en busca de alimento, confundió el ojo de un pescador que afloraba a la superficie del agua y casi se lo enguye, creyendo que era un pez. A este río Areo, a 60 kilómetros norte de Soledad, había ido muy temprano y en compañía de su primo, el agricultor Juan Me¬dina, de 24 años y natural del vecindario "Las Bombitas", Distrito Independencia, para arponear peces debajo del río. Y contó al llegar aquí con la córnea y el iris del ojo izquierdo desprendido cuando emergía del río en busca de aire, la parda ave marina se le lanzó de picada, confundiendo posiblemente su ojo con un pez. Medina ingresó al Hospital Universitario de esta ciudad auxiliado por Eustaquio Rojas, comandante de una patrulla policial del otro lado del río Orinoco.(AF)

viernes, 26 de febrero de 2021

HOTEL BOLÍVAR 1900

Según la información hemerográfica de que dispongo, la imagen corresponde al antiguo Hotel Bolívar inaugurado en 1900 por el comerciante Emiliano Eugenio Monch Siegart Allí se dio a conocer por primera vez en noviembre de 1901 el Bioscopio un prototipo de cinematógrafo en el que se exhibió la película “El Famoso baile de la serpentina” y la “Destrucción del vapor de guerra Maine”. Este hotel de la Calle Orinoco como entonces se llamaba, pasó después a propiedad de José María Méndez, quien lo vendió en 1935 a la señora Ana María Stevenson. Finalmente, el hotel dejó de funcionar y se le dio otro destino vinculado con el Resguardo fluvial y el depósito de cabotaje cedido por el Gobierno central para la construcción del Gran Hotel Bolívar, hoy Hotel Colonial, inaugurado en 1952. (AF)

sábado, 20 de febrero de 2021

UNA MISS BOLÍVAR AUTÉNTICA

Candíz Shutie Blanco, al igual que Marlene Manrique (en la foto), decía aludiendo a las anteriores, que ella era una Miss Bolívar auténtica. Ciertamente, muchas son las candidatas que en certámenes anteriores representaron al estado Bolívar, sin conocerlo siquiera. En una de esas presentaciones a la prensa le preguntaron a la de turno por la Sapoara y respondió ingenuamente interrogando ¿Qué animal era ese?. A Candiz no le hubiese ocurrido eso, primero porque no es ingenua y segundo porque nació a la orilla del Orinoco y aunque residenciada en Caracas, nunca dejó de visitar Ciudad Bolívar y de tener contacto con la tierra. Cuando ella era aspirante a coronarse como Miss Venezuela 1991, dispensó una visita al alcalde de la ciudad Jorge Carvajal para conocer los problemas de la comunidad, especialmente los que atañen a la niñez y al programa de revitalización del Centro Histórico. Y lo hizo con propiedad pues la candidata dijo ser economista, con un postgrado en gerencia administrativa en Boston y poliglota, pues domina además de su propia lengua el inglés y el francés. Candiz Suthie Blanco había sido candidata el año anterior y hubo de retirarse al sufrir accidente en el Pico El Avila, cuando realizaba prácticas de montañismo de la que es aficionada junto con la natación y el flamenco. (AF)

viernes, 19 de febrero de 2021

EL GERMANO QUE VINO POR SAPOARA Y SE QUEDÓ POR MANGO

Bocholt es una ciudad alemana próxima a la frontera con Holanda, donde se habla el alemán antiguo, que viene siendo el idioma holandés actual. Allí nació, poco antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial, Wolfgang Schoroder Lennartz, un profesional de la hotelería, del turismo y del arte culinario vinculado a nuestro continente por ese puente que significa turismo internacional. Llegó a Venezuela el 8 de agosto de 1981, contratado por Evca, una empresa norteamericana de consumo, dedicada a la elaboración de comidas para comedores industriales. Wolfgang vino dentro de un grupo de diez técnicos de diferentes países, especializado en comidas internacionales, para poner en marcha los comedores de los campamentos de trabajo de la presa Raúl Leoni. Veinte días después de haber llegado directamente de Europa a Guri, el grupo organizó y puso a funcionar los comedores. El 28 de agosto salieron las primeras comidas para 8 mil obreros que laboraban en la construcción de la última etapa de la presa. El contrato era por seis meses mientras se entrenaba al personal. Pero Wolfgang, a pesar que se le agotó el tiempo del contrato, Se quedó en Guayana, con otros centenares de extranjeros que adoptaron esta tierra como segunda patria porque siempre les fue imposible resistirse a la magia del agua y de la selva. Pero, por qué no decir también, al encanto de la mujer venezolana. Porque en el caso de Wolfgang, Conchita, su esposa, excelente profesional de medicina, fundadora de los servicios de terapia intensiva en Guri, es una caraqueña gentil que comprometió su destino con el hombre venido de mundos tan distantes. Cuando Wolfgang aceptó la oferta por seis meses como entrenador de cocina en Guri, quiso saber en qué parte de Venezuela quedaba ese lugar y, lógicamente, fue a nuestra embajada en Frankfort a solicitar información, pero el personal no supo donde ubicarlo, de manera que Wolfgang Schoroder Lennartz embarcó en Viasa y en menos de dos días estaba en el pórtico de la selva guayanesa, aturdido por el espectáculo imponente de aquel hermoso río batallando contra el muro. - No sabía dónde estaba. - ¿Qué siente un hombre en esas condiciones? - Es algo inquietante y a la vez emocionante. La aventura está llena de esas cosas. Además, no era la primera vez que me ocurría, que viajaba y me impactaba lo desconocido. Antes había estado en Chile, Argentina, Uruguay, Brasil, Colombia, Holanda, Singapur, Australia y Nueva Zelanda. “Un mes después de mi llegada, - dijo - cuando en una tertulia familiar alguien me habló de Angostura. Desde mi primera escuela sabía de esta ciudad lejana con la cual se vincularon importantes científicos alemanes como Alejandro Humboldt que escribió seis trabajos sobre Guayana; Koch Gunberg, etnólogo, explorador del Roraima; Roberto Schombert, etnólogo y explorador del Amazonas y de la Gran Sabana y, entre otros, Ernesto Ule, quien estudió la formación vegetal de la Gran Sabana. Acotamos que el médico Juan Teófilo Benjamín Siegert, inventor del famoso Amargo de Angostura, también era alemán y que esta capital en el siglo pasado importaba por el Orinoco muchas cosas del puerto de Hamburgo, de manera que no es extraño que en Alemania se conozca más a Angostura que en la propia Venezuela. Lo cierto es que Wolfgang estuvo metido de lleno en Ciudad Bolívar y debidamente instalado con una rotisería y una agencia de fiestas tan productiva que el negocio le dio lo suficiente para reinvertir sus ganancias en un complejo agro industrial donde la materia principal era el abundante, amarillo aromático mango guayanés.(AF)

miércoles, 17 de febrero de 2021

“AMOR A LA PATRIA” PERIÓDICO QUE SUSTITUIRÍA AL “CORREO DEL ORINOCO”

El “Correo del Orinoco” habría podido permanecer si su vida no hubiese estado limitada desde un comienzo por la provisionalidad de Angostura como sede del Poder Nacional. Siendo un órgano del Supremo Gobierno debía asentarse en donde quiera que este estuviese y es por lo que al escogerse a Nuestra Señora del Rosario de Cúcuta como centro de los poderes de Venezuela y Cundinamarca reunidas en una sola nación, queda sellado el destino del “Correo del Orinoco”. No obstante, tuvo vida hasta marzo de 1822 en que el coronel José Ucroz, gobernador de la provincia, cesó como tal. La vida temporal del “Correo del Orinoco” la previó Bolívar cuando a fin de que se multiplicaran los establecimientos tipográficos becó a jóvenes para que aprendieran el arte de la imprenta en los propios talleres del Correo. Meses después, mayo de 1820, se diseñó un nuevo periódico: “Amor a la Patria”, no oficial, del que al parecer solo se publicó un prospecto. Un aviso en la edición 61 del Correo da cuenta del mismo y se le atribuye a un grupo de amigos “que quieren demostrar que hacen lo que le es posible y han formado el prospecto, de un periódico con el título de “Amor a la Patria”, que está ya impreso. Los que deseen tomarlo y suscribirse ocurrirán a la casa de la Imprenta y se instruirán del plan y demás conducente.” “Amor a la Patria” iba a ser el sustituto del “Correo del Orinoco”, pero la depresión económica como intelectual de la Angostura a causa del cambio de sede del supremo gobierno fue tal que el periodismo desvaneció y hubo que aguardar 17 años para que se reanimara con la aparición de “El Telégrafo” (AF).

domingo, 14 de febrero de 2021

CALIPSO DE EL CALLAO DIFERENTE AL ANTILLANO

El oro y el color de la piel de su gente no es sólo lo que llama la atención de El Callao, sino también su Calipso de reminiscencias ancestrales, muy diferente al antillano porque es sin steel band y con cantos. Calipso muy del pueblo, animando comparsas llenas de símbolos y colorido, moviéndose al ritmo de los tambores, bunbac, el rallo y la campanilla. Ambaicalá, Body Man Down, al ritmo del calipso van coreando las comparsas de la Negra Isidora, de Kenton y de los Hermanos Clark que aún muertos sobreviven en la memoria y tradición. A la percusión se suman las cuerdas del bajo, de la guitarra y del cuatro más el sonido metálico del cencerro y el chascoso de las maracas. En El Callao, la danza y la música tienen sabor propio y es igual en el carnaval, en la Navidad y año nuevo como en los días de su patrona Nuestra Señora del Carmen o como cuando llega un personaje muy importante. Pero es durante los carnavales cuando El Callao se transforma en señuelo nacional. Oscar Palacios Herrera, Paco Vera, Régulo Pérez y Juvenal Herrera eran los primeros en llegar. Desde todos los ángulos de la Guayana y desde más allá del Orinoco viene gente a bailar el calipso un tanto amerengado. A el domplín, el calalú, el bananpilé y el yinyabié. Entre trago y trago del mabí se canta el ambaicalá de la Negra Isidora por las calles estrechas del poblado que nunca dejan de ser interminables a la hora de “El Callao to morrow night”.(AF)