miércoles, 13 de marzo de 2013

Para conducir una aeronave basta haber estado al lado del Capitán?


Este escrito está rodando en varios Muros y lo comparto por que me parece una Gran Realidad:
"Imaginen por un momento que abordan un avión para salir de viaje y por el altavoz le anuncian: buenas tardes el comandante de la aeronave jamás estudió para piloto, pero estuvo mucho tiempo al lado de un capitán y eran muy buenos amigos, le confiarían la vida por muy bueno que parezca?... o que estén a punto de entrar a un quirófano y la enfermera le diga.. hoy el doctor no vino, lo va a operar un señor que nunca estudió medicina pero es muy amigo del Doctor.... dejarían que lo operara?... pues Sres. eso estamos haciendo con el País, se lo estamos entregando a un señor que lo único que hizo en su vida fue compartir unos ideales de alguien mas, que jamás se sentó en un pupitre, que no entiende que si bien la universidad no te enseña todo, si te da las herramientas para enfrentar las cosas y lo que es más importante, te enseña a PENSAR de manera UNIVERSA

martes, 12 de marzo de 2013

Nuevo vocablo presidencial. Atención Real Academia de la Lengua

File:Coat of Arms of the Royal Spanish Academy.svg
Estimado colega, no salgo de la "duda" sobre el léxico presidencial.

Como no comparto el cambio gramatical en cuanto al empleo del género, me parece  que tampoco es propio pretender crear nuevas palabras y verbos utilizando la memoria del mandatario fallecido.

Desde el domingo por la noche, en mis oídos hace ruido ""musealizar", muy utilizada por el Presidente (e) para señalar que convertirán en Museo el Despacho y demás dependencias de Miraflores donde transito el Presidente Chávez durante los catorce años de sus mandatos.

También me creó mucha confusión sobre otros tópicos señalados por el encargado de Miraflores. Como por ejemplo, que este Martes la Asamblea Nacional va a enmendar  la Constitución  para trasladar los datos del Presidente Chávez al Panteón, antes del tiempo establecido por nuestra Carta Magna. Claro, ellos son mayoría y lograrán sus propósitos, sea o nó lo que los méritos del mandatario tengan para ubicarse en ese sitial de honor de los venezolanos.

Creo que como cristiano que se presentaba el Presidente Chávez ya es hora que descanse en paz y quien lo aprecie, los considere su héroe, su líder, su padre, su maestro, lo recuerde por sus obras, no por exponerlo en una urna de cristal en un Museo.

Anace

sábado, 9 de marzo de 2013

Entre lo cierto y lo verdadero / Óscar Tenreiro


Nunca me gustó aludir por su nombre a esa figura que estaba como suspendida sobre todo acontecimiento aquí. Prefería usar el de su "persona", de su máscara, de su rol público. Lo llamé el Líder, el Gran Conductor, el Jefe, etc. porque no quería repetir su miles de veces repetido nombre de bautismo. Me parecía un peso incómodo que alejaba la serenidad y convirtió a una sociedad frágil y desestructurada, sin instituciones, donde ha reinado casi siempre lo improvisado, que busca su camino a tumbos, en una suerte de terreno de pruebas en el cual lo único que importaba eran sus designios. Hizo de Venezuela un espacio que difícilmente podía llamarse una nación, tan a su merced estaba, evocando situaciones parecidas a las de otras tierras en donde también hombres dotados para la seducción manejaron el Poder a su antojo. Pero en esos casos había, aparte del mundo artificial que crearon esos Líderes, una cultura fuerte que permitió recomponer las cosas. Aquí la precariedad de toda tradición hará esa tarea mucho más difícil. Y si, tal como me comentaba de cuando en cuando un amigo cercano que decidió sumarse a lo que el Ausente proponía y hoy está en las alturas del Poder, los partidos del pasado "habían hecho un enorme daño a Venezuela", el daño que dejará como herencia el Ausente abruma por su dimensión y su posible profundidad. Y digo "posible" con esperanza, alimentando el deseo de que toda la carga debida al manejo abrumador de medios de comunicación, de dinero, de triquiñuelas para controlar la adhesión, no haya llegado hasta las profundidades de la psique colectiva. No sé si tendré razón.

ANTIGRINGOS SOCIALISTAS...QUIEREN VISA, INTERESANTE PERSPECTIVA





(Comentario Escrito por un Argentino)
Se ha dicho que vivimos en el país más antiyanqui del mundo, junto con España y Francia. Por lo tanto, debe de haber muchos lectores de estas líneas que, por alguna razón, odian a los Estados Unidos. A todos ellos querría hacer llegar (con el mayor respeto) un pensamiento que considero atendible. El mundo entero, mucho antes de la globalización, se ha convertido en una prolongación del american way of life.
El lector antiyanqui que me está leyendo a la luz de una lamparita creada por Mr. Thomas Alva Edison en 1876, viste un jean patentado por Mr. Levi Strauss en 1873. Yo ya no escribo en las máquinas de Mr. Burns (1826) o Mr. Cristopher Sholes (1867) ni en las legendarias Underwood de Chicago, sino en una computadora diseñada por el joven Bill Gates.
Hoy es domingo, de modo que no sonó el despertador creado por Mr. Levi Hutchins en 1787. Pero sí funciona a toda máquina el láser inventado por Charles Townes y Arthur Schawlow (1960) y hoy tan útil en la cirugía, la odontología, la música, el cine, la guerra, etcétera. Sigo escribiendo, mientras no nos interrumpa el teléfono (Mr. Graham Bell, 1876) y no me llamen de la radio, que fue creada por Mr. Lee de Forest en 1906.
Más tarde, perezosamente, haremos inflar las llantas (Mr. John Dunlop, 1888), aunque los neumáticos (Mr. Thompson, 1845) están hechos de caucho vulcanizado (Mr. Goodyear, 1839), pero no sin antes chequear los mensajes del teléfono celular, que funciona gracias a los transistores creados por Mr. Bardeen, Mr. Brattain y Mr. Shockley en 1948. No hay apuro: ya no estamos en los tiempos en que Mr. Isaac Singer inventó la máquina de coser (1851), de modo que bien podemos tomarnos un vino blanco frío, que sacaremos del refrigerador (Mr. Jacob Perkins, 1834).
Gracias a Dios, disfrutamos de un producto tan gratificante como nuestro querido diario, compuesto con la máquina de hacer papel que inventó Mr. Dickinson en 1809, mediante las rotativas creadas por Mr. Hoe en 1846.

Más tarde podemos bajar a la calle por el ascensor que creó Mr. Otis en 1853. ¡Si va a salir, no olvide afeitarse con el artilugio diseñado por Mr. Gillette! ¿El pasto está bien cortado gracias a la máquina que pergeñó Mr. Hills en 1868? En un mediodía de sol primaveral, uno ya sueña con enero: el día en que el avión (Mr. Wright, 1903) nos lleve a Punta del Este o a Pinamar.
Las autopistas, los edificios de propiedad horizontal, las casas con pileta, la radio, la televisión, el rock, que lejos de ser "nacional" forma parte del folklore norteamericano, como la batería y la guitarra eléctrica, las grandes tiendas, el cine. Todos los sueños, todas las realidades, todos los placeres, todos los dolores del mundo moderno, son una emanación de lo yanqui. Hasta el izquierdismo moderno fue creado por los americanos, a partir de C. Wright Mills y su concepto The New Left.
Para los franceses, EE.UU. es la potencia que les arrebató la primacía de Occidente, en estrecha alianza con un viejo enemigo de los galos: Gran Bretaña. Para los españoles, es la nación que vino a despojarlos de sus últimos bastiones americanos: Cuba y Puerto Rico . Pero, al mismo tiempo, los europeos suelen agradecer que los yanquis les sacaron de encima dos amenazas tenebrosas: Stalin y Hitler.
¿Y en la Argentina ? La historia indica que Kissinger se mostraba complacido con Videla, pero el Movimiento de los Derechos Humanos fue creación de Jimmy Carter y Patricia Derian, enemigos jurados de la dictadura.

Cuando nuestros hijos dejan el país para buscar un futuro mejor, los impulsamos hacia Nueva York, Chicago, Los Angeles . De hecho, son varias veces 100,000 los argentinos que viven en Yanquilandia. ¿Para qué fingir que nos gusta Castro cuando no depositaríamos un centavo en el Banco de Cuba?
Nota con algunas cositas de más: Los odiados gringos están a la delantera en todos los avances y modernizaciones del Mundo. La gran mayoría de los Premio Nobel, en ciencias, y de los inventos e innovaciones que se realizan en el mundo salen de cerebros e instituciones yanquis. También promueven los mejores espectáculos y crean los estilos de la moda. Han inventado el Iphone, el Ipod, y un montón de artilugios de todo tipo, y comercializado en grande el internet. Ahí tienen a google y a facebook.
Como si fuera poco, inventan los medicamentos y tecnologías más avanzados y hacen las películas que más le gusta a sus amigos y enemigos. Fueron los primeros en llegar a la luna, y llevan la delantera en los estudios espaciales. La TV norteamericana, CNN, es la más vista en el planeta. Los mejores armamentos los fabrican ellos, pero estos inventos son deplorables. Al comunismo lo vencieron sin disparar un tiro y al nazismo a puro cañón.
Tampoco nadie les gana en cuestiones de derechos humanos, libertad y justicia penal, pero nadie los copia. Ah, nadie emigra a Argentina , y comparativamente, pocos emigran a España y Francia en comparación con los millones que se van a vivir ilegales a yanquilandia. Hasta no son tan racistas como decían, pues a pesar de que allí la raza negra es minoritaria, tienen un presidente negro.
Casi todo lo que usted usa, come o viste tiene algo que proviene de una inventiva yanki, aunque ahora lo fabriquen en China .

Y para rabia y sicosis de los antiyankis y a pesar de que padecen una crisis, que la padece casi todo el mundo, las estadísticas recientes (2009) muestran que gringolandia sigue siendo el país más poderoso del mundo, dejando muy atrás a sus competidores, Alemania, China y Japón.
Está claro, mientras hay gente por ahí que los odia y envidia, los yankis te dan la mano, así son ellos.
Pase este escrito y agregue su comentario... Gracias.
COMENTARIO EXTRA:
Los ecuatorianos, que huyen de Correa, no viajan a Cuba, los de Venezuela, los de Nicaragua, los de Bolivia y los cubanos que huyen de Cuba no lanzan sus balsas improvisadas hacia Argentina o a ningún otro país, sino a USA.
Los mejicanos (y otros latinos, que desgraciadamente muchos mueren en el intento), no cruzan las fronteras hacia el Sur, sino hacia USA . Los emigrantes de Europa no fueron hacia Francia, Inglaterra, o España, sino hacia USA :
"One Nation Under God."

Un amanecer distinto para Venezuela /Enrique Krauze, escritor mexicano, director de la revista Letras Libres.


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·         Tras el fallecimiento de Hugo Chávez, su país deberá encontrar, tarde o temprano, cauces de concordia. En este nuevo despertar, una fuerza latente deberá tener un protagonismo especial: los estudiantes

Si un hombre fuese necesario para sostener el Estado, este Estado no debería existir, y al fin no existiría”.
Simón Bolívar,
20 de enero de 1830

Tenía una concepción binaria del mundo. Veía el mundo dividido entre amigos y enemigos, entre chavistas y “pitiyanquis”, entre patriotas y traidores. En libros y ensayos reconocí su vocación social. Creo que la democracia latinoamericana no podrá consolidarse sin Gobiernos que, junto al ejercicio de las libertades y el avance de la legalidad, busquen formas efectivas y pertinentes de apoyar a los pobres y marginados, a los que no han tenido voz y apenas voto. Pero una cosa es la vocación social y otra es la forma en que se practica esa vocación. Obsedido por una anacrónica admiración del modelo cubano (y por la ciega veneración de su caudillo eterno, a quien muchas veces llamó “padre”), Hugo Chávez desquició las instituciones públicas venezolanas, desvirtuó y corrompió a la compañía estatal PDVSA y protagonizó lo que quizá sea el mayor despilfarro de riqueza pública en toda la historia latinoamericana. Pero siendo tan graves sus errores económicos, palidecen frente a las llagas políticas y morales que infligió a su país.
Chávez no solo concentró el poder: Chávez confundió —o, mejor dicho, fundió— su biografía personal con la historia venezolana. Ninguna democracia prospera ahí donde un hombre supuestamente “necesario”, imprescindible, único y providencial, reclama para sí la propiedad privada de los recursos públicos, de las instituciones públicas, del discurso público, de la verdad pública. El pueblo que tolera o aplaude esa delegación absoluta de poder en una persona, abdica de su libertad y se condena a sí mismo a la adolescencia cívica, porque esa delegación supone la renuncia a la responsabilidad sobre el destino propio.
El daño mayor es la discordia dentro de la familia venezolana. Nada me entristeció más en mis visitas a Caracas (nada, ni siquiera la escalada del crimen o el visible deterioro de la ciudad) que el odio inducido desde el micrófono del poder contra el amplio sector de la población que disentía de ese poder. El odio de los discursos, de las pancartas, de los puños cerrados; el odio de los arrogantes voceros del régimen en programas de radio y televisión. El odio de las redes sociales plagadas de insultos, calumnias, mentiras, teorías conspiratorias, descalificaciones, prejuicios. El odio del fanatismo ideológico y del rencor social. El odio cerrado a la razón e impermeable a la tolerancia. Esa es la llaga histórica que deja el chavismo. ¿Cuánto tardará en sanar? ¿Sanará alguna vez? Es un verdadero milagro que Venezuela no haya desembocado en la violencia partidista y política.
Nada me entristeció más que el odio inducido desde el micrófono contra los antichavistas
Desde hace unas semanas, al agudizarse la enfermedad de Chávez, anticipé su inmediata y tumultuosa santificación. Así ocurrió con Evita Perón en Argentina, pero dada la tradición caudillista de Venezuela, la sacralización de su figura será más honda y permanente. Hugo Chávez ha logrado la inmortalidad que soñó siempre. En el alma de muchos de sus compatriotas (y de no pocos simpatizantes en América Latina) compartirá las glorias del Libertador. Hasta el comandante Fidel Castro podría sentirse desplazado, víctima de un suave pero implacable parricidio.
¿Qué ocurrirá ahora, tras su muerte? Toda conjetura es riesgosa y todo puede pasar, hasta la división interna entre el ala ideológica y militar del chavismo o el triunfo de la oposición. Con todo, es probable que el sentimiento de pesar, aunado a la gratitud que un amplio sector de la población siente por Chávez, faciliten el triunfo de un candidato oficial en unas eventuales elecciones. A ello contribuirán también los órganos electorales, fiscales, judiciales y —en parte— los legislativos, que seguirán en manos del chavismo. Su retrato, su silla vacía, su imagen retransmitida interminablemente, acompañarán por un tiempo al nuevo presidente. Pero todos los duelos tienen un fin. Y en ese momento todos los venezolanos, chavistas y no chavistas, deberán enfrentar la gravísima realidad económica.
Los indicadores de alarma son del dominio público. El déficit fiscal es del 20% del PIB, unos 70.000 millones de dólares. El tipo de cambio oficial de poco más de 6 bolívares por dólar, se triplica en el mercado negro. La inflación, por varios años, ha sido la más alta de la región. El desabasto (originado por el desmantelamiento de la planta productiva, el éxodo de la clase media profesional y la crónica falta de inversión) se ha convertido casi en una tradición venezolana. Hay una aguda carestía de divisas. ¿Cómo explicar que un país que en la era de Chávez ha percibido más de 800.000 millones de dólares por ingresos petroleros presente cuentas tan alarmantes?
Buena parte de la explicación está en el petróleo. En 1998 Venezuela producía 3,3 millones de barriles diarios y exportaba (y cobraba) 2,7 millones de barriles diarios. Ahora la producción se ha desplomado a 2,4 millones de barriles diarios, de los que solo cobra 900.000 (los que vende a Estados Unidos, el odiado imperio). El resto que no se cobra se divide así: 800.000 van al consumo interno, prácticamente gratuito (y que provoca un jugoso negocio de exportación ilegal); 300.000 se destinan a pagar créditos y productos adquiridos en China; 100.000 se restan por importación de gasolina; y 300.000 van a países del Caribe que pagan (si es que pagan) con descuentos y plazos amplísimos; o simbólicamente, como Cuba, que paga sus 100.000 barriles con el envío de personal médico, educativo, y policial (y se beneficia del petróleo venezolano al extremo de reexportarlo).
El nuevo líder ya no será el que lo explicaba todo, lo justificaba todo, lo amortiguaba todo
Un presidente chavista deberá enfrentar esta realidad y encarar al público. Pero ese mandatario ya no será Chávez, el hipnótico Chávez, Chávez el taumaturgo, el líder que lo explicaba todo, lo justificaba todo, lo amortiguaba todo. La gente reaccionará a esas situaciones con indignación: culpará a los chavistas de no estar a la altura de su legado, dirá “Chávez no lo habría permitido”, “Chávez lo habría resuelto”. Llegado ese punto, el propio régimen chavista podría persuadirse de la necesidad de un diálogo conciliatorio que ahora parece utópico. Y ahí podría abrirse una oportunidad tangible para la oposición.
Después de largos años de inconsistencias, omisiones y errores, la oposición venezolana ha estado unida, eligió a un líder inteligente y valeroso (Henrique Capriles) y tuvo un buen desempeño en las elecciones: recabó casi siete millones de votos. Durante la agonía de Chávez, sin dejar de alzar la voz de protesta, la oposición mostró una notable prudencia que debe refrendar en estos días de duelo y crispación. Si la oposición —que ha esperado tanto— conserva la cohesión y la presencia de ánimo, podría avanzar en las siguientes elecciones (legislativas, regionales, presidenciales) y recuperar las posiciones que ha perdido. En ese despertar, una fuerza latente deberá despertar también: los estudiantes. Tuvieron un papel clave en el referéndum de 2007 (que impidió la conversión abierta de Venezuela al modelo cubano) y quizá lo tengan una vez más ahora.
Si bien nadie puede descartar los escenarios de violencia, no los preveo. Por el contrario: creo que con el fallecimiento del gran caudillo mesiánico (“redentor”, lo llamó abiertamente el propio Maduro) Venezuela deberá encontrar, tarde o temprano, cauces de concordia: si en los tres lustros de Chávez la violencia verbal no se desbordó en violencia física, es razonable esperar que no estalle ahora. Y el cambio podría ser contagioso: Cuba, la Meca del redentorismo histórico, el único estado totalitario de América, podría reformarse también como Rusia y China lo hicieron en su momento. Toda la región podrá oscilar entonces entre extremos políticos no radicales: regímenes de izquierda socialdemócrata, y Gobiernos de economía más abierta y liberal. Y para que el tránsito sea menos accidentado, Estados Unidos haría bien en dar señales inéditas de sensatez, levantando por fin el embargo a Cuba y cerrando definitivamente las cárceles de Guantánamo.
El siglo XIX latinoamericano fue el del caudillismo militarista. El siglo XX sufrió el redentorismo iluminado. Ambos siglos padecieron a los hombres “necesarios”. Tal vez en el siglo XXI despunte un amanecer distinto, un amanecer plenamente democrático.

Enrique Krauze es escritor mexicano, director de la revista Letras Libres.

martes, 5 de marzo de 2013

Sentencia del TSJ sobre el caso de Caperucita y el Lobo


Este trabajo no es de mi autoría, lástima que no tiene el crédito para colocárselo, pero es tan ingenioso que quiero compartirlo contigo, cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia (Luis Arrioja)

“Ha salido la sentencia del caso de Caperucita y el Lobo

La versión de la justicia venezolana en relación a Caperucita y el Lobo es la siguiente:

Visto y considerando los acontecimientos por todos conocidos :

1) Que Caperucita no desconocía que podía encontrarse con el Lobo.

2) Que tampoco era ajena al hambre del Lobo, ni a los peligros del bosque.

3) Que si le hubiera ofrecido la cesta de la merienda para que el Lobo calmara su hambre, no habrían ocurrido los sucesos referidos.

4) Que el Lobo no ataca a Caperucita de inmediato, y hay evidencias claras que primero conversa con ella.

5) Que es Caperucita quien voluntariamente le da pistas al Lobo y le señala el camino de la casa de la abuelita.

6) Que la anciana no es imputable ya que confunde a su nieta con el Lobo..

7) Que cuando Caperucita llega y el Lobo está en la cama con la ropa de la abuela, Caperucita no se alarma.

8) Que el hecho de que Caperucita confunda al Lobo con la abuelita demuestra lo poco que iba a visitarla, hecho que se tipificaría como
abandono de persona anciana por parte de la joven Caperucita.

9) Que el Lobo, con preguntas simples y directas, quiere desesperadamente alertar a Caperucita sobre su posible conducta final.

10) Que cuando el Lobo, que ya no sabe qué más puede hacer para alertarla, y se come a Caperucita, es porque ya no le quedaba otra solución.

11) Que es altamente posible que antes Caperucita hiciera el amor con el Lobo e incluso lo disfrutára.

12) Que la versión de que Caperucita, cuando oye la pregunta del Lobo:

«¿Adónde vas?» Responde: «A bañarme desnuda en el río..», cobra cada día más fuerza..

13) Que se desprende del punto anterior que es Caperucita la que provoca los más bajos instintos brutales y depredadores, en la pobre fiera.

14) Que el Lobo ataca, pero tal hecho corresponde a su propia naturaleza y a su instinto natural y animal, exacerbados por la conducta de la
susodicha Caperucita

15) Que merece un párrafo aparte la madre de Caperucita, quien exhibe culpabilidad por no acompañar a su hija conociendo los peligrosos del bosque

Por todo lo antes dicho, se absuelve al Señor Lobo y se dispone además:

1.- Apercibir a la familia de Caperucita, imponiendo a la abuela que se presente en el hospital que se designe, para su observación gerontológica.

2.- A la madre, apercibirla para que cumpla correctamente con sus deberes de madre..

3.- A Caperucita, (post mortem)     * Trabajo comunitario en el zoológico local para conocer plenamente la naturaleza y el instinto animal.

La familia indemnizará al Sr. Lobo a razón de BsF 500,00 diarios y ha de prepararle todas las tardes la merienda durante un año.
* Pagará las costas del proceso.

Aclarar asimismo en el presente fallo que este proceso no afecta el buen nombre y honor del señor Lobo.

Publíquese, archívese, y téngase por firme el presente fallo.

Luisa Estela Morales
Presidenta del Tribunal Supremo de Justicia en Venezuela, por instrucción del Comandante Presidente”.


lunes, 4 de marzo de 2013

El Bolívar que Chávez no leyó

QUE GRAN DIFERENCIA ENTRE EL PENSAMIENTO DE BOLIVAR Y EL DE CHAVEZ Y DE LOS PRESIDENTES DE AMERICA QUE COMPARTEN SU IDEOLOGÍA AFECTUOSO SALUDO.

Artículo de  Daniel Romero Pernalete,  sociólogo y Profesor Titular de la Escuela de Ciencias Sociales de la Universidad de Oriente,  Núcleo de Sucre"
Asunto: El Bolívar que Chávez no leyó

El Bolívar que Chávez no leyó

Daniel Romero Pernalete

Hoy, como nunca, se habla de Bolívar. Es elemento clave en la retórica presidencial... No hay discurso, de calle o de salón, que no esté aderezado con alguna descontextualizada frase del Libertador. El Presidente, ya por ignorancia, ya por conveniencia, omite a otro Bolívar: el Bolívar civilista, el estadista, el simple ciudadano que él siempre se sintió. Y cuando uno se acerca a ese Bolívar se da cuenta de cuán lejos está de las motivaciones y ejecutorias de un proceso que pretende arroparse con su nombre.

Cuando uno contempla asombrado los esfuerzos del Presidente por someter a su arbitrio a todos los poderes, no puede menos que recordar aquella parte de su Discurso en el  Convento de Franciscanos, el 2 de Enero de 1814, en la cual afirmaba: "Huid del país donde uno solo ejerza todos los poderes: es un país de esclavos"... Ese mismo pensamiento lo expresa catorce años más tarde, el 27 de Agosto de 1828, cuando se dirige a los ciudadanos de la Gran Colombia en los siguientes términos: "¡Compadezcámonos mutuamente del pueblo que obedece y del hombre que manda solo!". Ese es el Bolívar que Chávez no leyó.

Cuando uno revisa la invasión de militares, activos y retirados, en todos los niveles de gobierno, o escucha el discurso militarista y guerrerista del Presidente, se le viene a la memoria una lapidaria frase que Bolívar le escribió a Madariaga el 26 de noviembre de 1816: "El sistema militar es el de la fuerza, y la fuerza no es gobierno". Esta idea permanece constante en el Libertador, quien trece años más tarde, el 13 de septiembre de 1829, le escribe a O' Leary: "Es insoportable el espíritu militar en el mando civil".

Cuando uno escucha las amenaza de Chávez de permanecer en el poder hasta más allá de lo legal y legítimamente admisible, le retumban en los oídos las palabras de Bolívar en el Discurso al Congreso de Angostura, el 15 de febrero de 1819: "Nada es tan peligroso como dejar permanecer largo tiempo en un mismo ciudadano el poder"... Y cuatro años más tarde, el 15 de Abril de 1823, califica ya no la situación sino la actitud de quien se aferra al poder por todos los medios, cuando le escribe a Santander:  "Es una manía miserable el querer mandar a todo trance".

Cuando uno advierte los esfuerzos presidenciales por torpedear cualquier consulta ciudadana que ponga en riesgo su permanencia en Miraflores, piensa en el Bolívar que en carta al Dr. Castillo Lara, el 13 de septiembre de 1829, sentencia: "En los gobiernos no hay otro partido que someterse a lo que quieran los más".

Cuando uno tiene la paciencia y el valor de escuchar las alocuciones del Presidente, cargadas de odio, de insultos, de descalificaciones y de inquina, piensa en el  Bolívar que le escribe a Santander, el 15 de abril de 1823: "Los intrigantes corrompen los pueblos, desprestigiando la autoridad", opinión que ratifica al mismo Santander, el 23 de febrero de 1825, cuando le escribe: "En política nada vale tanto y cuesta menos como las demostraciones de respeto y consideración".

Cuando uno observa el uso que el Presidente hace de la Fuerza Armada para amedrentar y reprimir a todo el que se niegue a tragarse el proceso, recuerda lo que Bolívar escribió en el proyecto de Constitución para Bolivia, el 25 de mayo de 1826: "El destino del ejército es guarnecer la frontera. ¡Dios nos preserve de que vuelva sus armas contra los ciudadanos!".

Cuando uno, en suma, recorre la historia del último quinquenio, y suma las payasadas, los desatinos, las sandeces y las malcriadeces del Presidente, uno se convence (y cada día más) de que, como Bolívar le escribía a Santander el 12 de Noviembre de 1823, "Un necio no puede ser autoridad". Ese es el Bolívar que Chávez no leyó.